Todo lo que empieza tiene que acabar y otros tópicos varios que suelen ser mentira pero que, en este caso, se cumplen. Ni mi colección de discos (especialmente si tenemos en cuenta que algunos grupos los llevo escuchando desde que tenía 15 años) ni mi anecdotario son ilimitados y, aunque me han hecho buenas sugerencias, el espíritu del blog no sería el mismo si tengo que improvisar las listas o no tengo nada que decir sobre ellas.
Me alegra que la última lista de reproducción esté compuesta íntegramente por voces femeninas y digo que me alegra, no porque sea una lista de mujeres, sino porque creo que es muy bueno que no lo haya hecho a propósito: ha salido así. También hay que reconocer que es una playlist "moñosa" y "pavoncia" donde las haya... pero tampoco creo que haya mucha gente que no se ponga en ese modo cuando le afecta una despedida.
Las despedidas son tristes cuando alguien se va y no queremos que lo haga, así que la mayoría de canciones de adioses se refieren a eso. "Baby don't go" es bonita a más no poder, triste y un gran cierre del primer disco de las Dum Dum Girls, aunque es una canción original de Phil Spector. Todo un clásico del "no te vayas todavía", igual que esta perla (me encuentro cada cosa...) de la historia de la producción audiovisual.
Pese a que una se ha ido acostumbrando a las despedidas a base de vivirlas, siguen sin gustarme nada. Así que paso de hablar de ese tema y voy a aprovechar que es la última (ays, cuántas veces habré dicho eso...) para sacar de la manga unas cuantas anécdotas musicales que suelen resultar muy efectivas pero que no han tenido cabida en ninguna playlist anterior. Espero que así me exorcice y deje de dar el coñazo con las historias de la "mili".
La clásica historia de mi amigo Nick Cave
Volvía de una escapada de las cortas y me fui maleta en mano a Rough Trade East, donde estaba encargada de la cafetería, porque tenía que hacer papeleo de la tienda. Al llegar me dijeron con gran emoción que esa tarde (mediodía) iba a venir el mismísimo Nick Cave a firmar un libro, o algo así. Como no iba a tocar, me metí en mi mini oficina/almacén/pasillo/zulo donde la mesa era un congelador y la silla unas cajas.
Y ahí estoba yo con mis invoices y mis deliveries cuando viene el manager de la tienda de discos y me pregunta si puede entrar Nick Cave a lavarse las manos. Así que ahí me quedé pegada al lado del señor Cave (que aún no lo había visto con bigote y casi me da un pasmo) mientras se intentaba quitar la tinta de las manos porque, sabe Dios por qué, le habían hecho poner sus huellas sobre un cartón, en plan paseo de la fama. El hombre flipaba en colores porque eso no se borraba... y yo en plan azafata dándole jabón y sin saber qué decir. Así que le dije: "Welcome to my office" y él, muy educadamente, me dijo: "Oh, is this your office?... It's a nice office". Claro, me esperaba una voz de barítono, en plan Russell Crowe, pero de eso nada monada: australiano nasal a más no poder y muy entrañable, aunque me tuve que aguantar la risa mientras el pobre buscaba algo con lo que secarse y yo le arrancaba un cacho del rollo de papel azul que utilizábamos para limpiar las mesas... Cero glamour todo. "Thank you. Bye" y esa es mi historia con Nick Cave.
El señor Nick Cave |
Cuando me convertí en manager de Alex Turner
El cantante de los Artic Monkeys debió grabar su disco con el otro tipo de The Last Shadow Puppets por la zona del este de Londres. Venía a menudo a la tienda y se tomaba un latte (café con leche enorme), aunque hubo un día que se pidió una magdalena también (blueberry muffin), lo cual me dio un segundo y medio más de conversación con él. Mientras le atendía, veía que detrás había un chico japonés que no dejaba de mirar. Se acercó cuando Turner se había ido y me preguntó que si él era él ("is he him?" o algo así), le dije que sí y va el tío y me pregunta -a mí- que si le puede pedir un autógrafo... ¡chaval que yo sólo le he hecho el café, a mí qué me cuentas!
La canción de Saint Etienne no tengo muy claro de qué trata. No sé si es uno que se muere o simplemente se va pero el caso es que es tan épica, intensa y dice tanto "he's gone", que "Like a Motorway" es perfecta para una despedida.
Entradas gratis
Aparte de las acreditaciones de la época en que hacía radio y alguna invitación ocasional, siempre pago todo. Sin embargo, reconozco que también he tenido suerte. Ya conté en un post cuando una chica me dio una entrada para los Gorky's Zygotic Mynci y yo me hice la chula diciéndole quiénes eran sin saber que ella era la novia del cantante. Me pasó algo parecido en con los Libertines y con Depeche Mode, cuando fui sin entrada por si sonaba la flauta (al de Depeche Mode fui al parque de botellón, la verdad), y me encontré con una peña muy amable que me dio (DAR) una entrada.
Sin embargo, lo mejor fue con Suede. Hacían un concierto gratis en una tienda de discos pero las invitaciones eran limitadas y, para conseguir una, había que comprarse su recopilatorio de singles, algo que no tiene mucho sentido si tienes todos sus discos. Así que me negué pero fui igualmente por si se podía ver algo desde fuera. Y no, no se veía un carajo porque la persiana estaba bajada y, aunque apoyábamos la cabeza en ella, no se oía casi nada... Pero la diosa fortuna quiso que mi soledad y mis ojos caídos sirviesen para ablandar el corazoncito del chico de seguridad, que me pasó una pulserita como si me estuviera pasando drogas (y eso que, ni siquiera, se la había pedido). Qué alegría, y qué ridículo luego cuando hice la cola para conseguirle un autógrafo a Maje y fui la única que no llevaba el disco. Sólo tenía un bloc de notas pequeño (de los de Henri o Taurus) y me tuvieron que firmar cada uno en una hoja distinta.
Teniendo en cuenta que los llevo grabados en mi piel, no podía acabar el blog sin poner una canción de Echobelly (que ya me podían haber avisado de que el brazo no es siempre igual de terso). "Dark Therapy" fue la despedida a uno de los conciertos más decepcionantes de mi vida pero sirvió, no sólo para hacerme olvidar el resto de la actuación, sino para acabar levitando y reafirmarme en que Sonia Aurora es muy grande.
Así acabó la calle en la que empezaron a hacer cola a las 9 de la mañana los fans de Radiohead un día de enero de 2008, día en que hacía un frío en Londres para morirse. La gente daba la vuelta por la calle del fondo y los pobres de las tiendas de enfrente a Rough Trade East se tuvieron que quedar dentro después de cerrar porque no podían salir.
El día anterior mi superior me dijo que, al día siguiente, iba a haber un concierto secreto de un grupo muy importante y que sólo podía trabajar una persona en la cafetería (en la tienda de discos sólo había unas tres o cuatro personas). Dije que yo, claro. A las siete de la mañana ya estábamos allí y a partir de las nueve, hora en que se lanzó la noticia, empezó a aparecer gente que se sentó en la calle con sus portátiles a trabajar desde allí (sólo se daban 200 invitaciones). Me pasé todo el día haciendo tés y cafés sin parar de cesar (mi superior, el c****n, bien que se apuntó al carro pero no me ayudó ni una sola vez). Total, que a las 19h que estaba previsto el concierto, aquello era imposible.
Habían colocado pantallas para que la gente lo viera desde fuera (la puerta era toda de cristal) pero aquello colapsó. Un caos, un desastre... y finalmente anuncian que lo trasladan a uno de los bares de la zona (enano); así que viene la promotora y me pide, como no sabe qué toman Radiohead, no sé cuántos millones de cafés de todos los tipos con sus leches correspondientes, etc. Y allí me la veo que pilla los cafés (sin pagar) y tira a irse. Después de más de doce horas sin parar de currar y de haber quedado mal con mil peña (me salieron más amigos ese día que con veinte paquetes de Donetes), me tragué mi vergüenza (que normalmente lo de pedir no se me da muy bien) y con mis mofletes rojos le dije: "Yeeeeeeee tíaaaaaaaa [en inglés, claro] que llevo aquí todo el día... y sin pulsera no los voy a poder ver". Menos mal que le quedaban un par de pulseras y allí que me pude ir a pasar frío con el resto de mortales hasta que aparecieron Thom Yorke y compañía y se marcaron un conciertazo (por suerte para mí tocaron muchas de la etapa del OK Computer y anterior) para doscientas personas al borde de la hipotermia.
"Goodbye song" de The Moldy Peaches no necesita explicación.
Graham Coxon: "tó pa dentro", Björk: "tó pa fuera"
El guitarra de Blur fue cliente habitual de otra cafetería en la que trabajé mucho tiempo pero mis compañeras no le conocían y le dejábamos en paz. Una vez que tardó mucho en volver por allí, mi jefa, que era muy espabilada y ya sabía que era de Blur, le preguntó que por qué había estado tanto tiempo sin ir, y él contestó que había estado trabajando. Ella se hizo la súper tonta y le preguntó que de qué, así que dijo que había estado de gira y yo, como ya se había abierto la veda y Mireia me había dicho que lo había visto y que le había gustado mucho, pues le dije que una amiga lo había visto y que le había gustado mucho. Y ya. Mira, yo no sé quién se puso más rojo, si él que agachaba la cabeza y decía "thank you, thank you" o yo que me dio mucha vergüenza que a él le diera tanta vergüenza.
Björk es todo lo contrario. Bueno, ella no sé pero sus amigos sí. Apareció por sorpresa en un bar de Londres (que se lió una para que entrase la reina...), en el que me encontraba por casualidad, y se puso a pinchar. Tuvimos tanta suerte que su "cort d'honor" se puso junto a nosotros, que habíamos estado muy a gusto y tranquilos toda la noche, y empezaron a subirse encima de los sofás (abrigos) y en una mesa donde acababa de dejar una pinta de Guinness enterita que acabó en el suelo. Grrrrrrrrrrrr. Digo yo que los amigos de Björk podrían haberse pagado una cerveza... pues no, casi nos pegan los muy inútiles. En fin, vaya historia más fea para acabar.
Tendré que dejarlo con algo mejor. Otro clásico de las despedidas, uno de los primeros bailes a lo Macarena que me aprendí y, como no, en su versión noventera.
Good luck, and good night
Espero que sea un hasta luego!tu cort d'honor te lo agradeceria.
ResponderEliminarSiempre tuya,
La panchi.
Gracias a ti, panchi, por llamar
Eliminar¿Cómo que "y ya"? ¡Mira que te pongo un enlace a "algo se muere en el alma cuando un amigo se va"!
ResponderEliminarInfinitamente triste,
M.G.
¡Que no me voy a ningún sitio!
EliminarQué bien me lo he pasado con tus playlists Raquel!!! VUELVE PRONTO!!
ResponderEliminarJ.T. MELENAS
Esa era la intención, ¡me alegro!
Eliminar¿Cómo que te firmaron los cuatro? ¿Dónde coño está MI autógrafo?
ResponderEliminar¿No te lo di? Ups, pues a saber...
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