Primer chapuzón de la temporada este fin de semana y por lo tanto: ¡queda inaugurado el verano! El problema es que me salía una playlist de tropecientas canciones, así que lo he tenido que acotar al primer ingrediente fundamental del verano: el sol.
Con el primer chapuzón han aparecido las primeras pecas y como los Gorky's Zygotic Mynci no podían faltar en una playlist del verano, he elegido "Freckles". No es un grupo que vaya a tocar la pachanga del pueblo en fiestas pero son perfectos para tumbarse bajo el sol, aunque sólo sea un ratito. Me estoy reconciliando con el sol gracias a la edad, a la ausencia del mismo durante unos cuantos verano y después de recorrer muchos protectores solares y perder la cuenta de los lunares que tengo en la espalda.
Ni soy persona de día ni persona de verano pero con los Gorky's me convierto si hace falta, porque como dicen en "How I long to feel that summer": "...and the days were so long and nothing could go wrong".
Ni soy persona de día ni persona de verano pero con los Gorky's me convierto si hace falta, porque como dicen en "How I long to feel that summer": "...and the days were so long and nothing could go wrong".
Lo de los Beach Boys es evidente. Y eso que, aunque "Wouldn't it be nice" no es su canción más veraniega, a mí me siempre me ha parecido que lo era. Antes de los blogs, algunos hacíamos cintas y CD's recopilatorios de temas varios; tengo uno titulado "No Aloha" con canciones de verano entre las que está esta de los Beach Boys y algunas otras que no recordaba y que me darán para unas cuantas playlists más. Era un gran CD para escuchar en el patio de casa el último verano que tuvimos buen tiempo durante más de una semana en Londres, antes de que empezase el cambio climático: Mundial de fútbol 2006, en el paro y "buscando" trabajo con la mente desde la piscina (¡en Londres!). Fue nuestro "Verano Azul" particular, al menos hasta que se nos pinchó la Toy.
Mira que dan de sí los amores de verano. "Amores de estío son como los brotes, que cuando florecen es para morir" que decía Nino Bravo. Mi amor por Ash empezó en la adolescencia, con un agobio importante. En el festival de Benicàssim de 1996 parece que sólo les daba para poner dos canciones desde los altavoces entre concierto y concierto. A mí al final me parecían la misma y tardé tiempo en distinguirlas: una era "Oh Yeah" de Ash y la otra "Slight Return" de los Bluetones. Lo gracioso es que Ash no tocaban y los Bluetones cayeron de cartel, por lo que no tenía mucho sentido ponerlos porque, aunque eran dos temazos, me dio mucha rabia comprobar que no era de ninguno de los grupos que tocaban. Lo gracioso es que entonces creí que mi amor forever sería para los Bluetones, porque su canción me gustaba más, pero no, al final me quedé con la más fea. Cosas de la adolescencia. Eso sí: los bailes del cantante de Bluetones son impagables y nunca los olvidaré...
A Ash les prometí amor eterno en otro Benicàssim, con uno de esos Momentos en Vivo para Morirse que debieron en gran parte a Weezer. Si hay una canción de sol es "Island in the sun" que marcó un verano que empezó y acabó con Weezer. En el primer concierto, Rivers Cuomo parecía que estuviera de funeral, presentaban el Make Believe que, así de golpe, me pareció más cercano a Camela que a Weezer y, como primer concierto de grupo favorito -el primero al que fui con falda para celebrarlo (madre mía, qué tonterías tiene una...)- fue una decepción. Pero de rebote me valió un amor de verano. En el segundo concierto de Weezer de aquel verano, Rivers tocó a pelo, guitarra en mano, el "Island in the sun" desde el centro del teatro y se me pusieron los pelos de punta, ya me encantaba el Make Believe y por fin lo dieron todo, pero el amor de verano me colgó cuando le llamé para que escuchase "El Scorcho", su canción favorita, y fue una decepción. Pero de rebote me valió un conciertazo, así que: tan feliz.
Ostia, no lo he hecho a propósito pero la última vez que vi a ese amor de verano, él estaba tomándose unas cervezas en una terraza con unos colegas y yo pasé por allí, como quien no quiere la cosa, de camino a un concierto de Dinosaur Jr. Qué miedo me doy con tanta casualidad.
"Take a run on the sun" es de las canciones más marcianas de Joe Mascis y además también tiene un vídeo curioso, con esa guitarra que vale para todo, pero como las dos versiones del vídeo de "Island in the sun" también son muy chulas, al final no pongo ninguno de todos. [Pues que no está el "Take..." en Spotify, lo qué hay que ver. Nada, tendré que poner "Freak Scene"]Para acabar y dar un poco de acción a la playlist: "Memory of a Festival" de dEUS. Un tema que también podría entrar en una lista de canciones para prepararse para salir de fiesta pero que se cuela en esta playlist porque es veraniega, buenrollera y, evidentemente, muy festivalera.
Los festivales, aunque tengan gran parte de coñazo, son una buena manera de pasar los fines de semana del verano. Y si no hiciera tanta calor en algunos, serían todavía mejor porque más de una vez me he visto obligada a dormir a la intemperie porque no había manera de meterse en la tienda de campaña (y encima una vez me robaron el bolso que tenía como almohada).
Este veranito caerá algún que otro festival, aunque me parece que este año dEUS no toca. Recuperaremos a los Suede, que también tienen alguna cancioncita que otra que es muy veraniega.
Así que nada, habrá que disfrutar del verano lo mejor que se pueda. Pidamos respeto al calor para que no sea muy pesado y festivales baratitos para pasar un buen rato. Amén.